Viviendas de protección oficial: ¿Qué son y cómo puedo optar a ellas?

Las viviendas de protección oficial son una opción importante para aquellos que buscan acceder a una vivienda propia a un precio asequible. Y es que el acceso a la vivienda es una aspiración compartida por muchas personas en España que, a pesar de tener un trabajo remunerado cada mes y cierta seguridad laboral, tienen muchas dificultades para conseguir un hogar. 

Es en este contexto que las viviendas de protección oficial (VPO) se presentan como una alternativa asequible y accesible para aquellos con unas rentas más bajas. 

En este artículo, exploraremos qué son las VPO en España y cómo puedes optar a ellas.

¿Qué son las viviendas de protección oficial o VPO?

Las viviendas de protección oficial en España son viviendas destinadas a personas o familias con recursos económicos limitados. El acceso a su compra está regulado por el Estado y las comunidades autónomas. Estas viviendas se ofrecen a un precio inferior al del mercado libre y su objetivo principal es garantizar el acceso a una vivienda digna y asequible.

Las VPO en España están sujetas a una serie de normativas y requisitos establecidos tanto a nivel estatal como autonómico. Cada comunidad autónoma tiene su propia normativa, por lo que es importante consultar las regulaciones específicas de la región en la que te encuentres para conocer los requisitos.

El objetivo de las viviendas de protección oficial es convertirse en una solución para combatir el problema de la falta de vivienda asequible y garantizar que todos los ciudadanos tengan la oportunidad de acceder a un hogar digno, como protege la constitución.

¿Por qué se clasifica una vivienda como VPO?

Los pisos de protección oficial se construyen bajo las reglas del Plan de Vivienda de cada Comunidad Autónoma. Y son éstas las que deciden cuántas propiedades se destinarán a esta finalidad. Para hacerlo, reciben una subvención del estado y normalmente se construyen con el propósito de ser vendidas, alquiladas, o bien para un alquiler con opción a compra. Finalmente, cubren, junto al estado, la diferencia entre el precio de mercado y el precio de la vivienda protegida.

Los interesados tienen la posibilidad de obtener una vivienda a un precio inferior al de mercado, o bien una serie de subvenciones para su adquisición. A cambio de esta asistencia, una vez obtenido el inmueble se deben cumplir una serie de normas relacionadas principalmente con su uso.

En un principio la vivienda debe usarse únicamente con un propósito residencial, además debe ser el domicilio habitual del comprador. Es cierto que con el paso de los años el comprador obtendrá la posibilidad de revender la vivienda. Para evitar posibles fraudes, el estado tendrá preferencia de compra sobre el propietario. Además, el precio de venta estará fijado por la misma administración. 

VPO de promoción pública o privada

Muchas entidades privadas están interesadas en construir este tipo de inmuebles, pues conllevan ciertos beneficios. Así, estas constructoras se comprometen a vender el inmueble a un precio inferior al de mercado, sin sobrepasar el estipulado por la administración, y, a cambio, obtienen del estado la financiación para buena parte del proyecto.

Por ello, dependiendo de quien ejecute la obra podemos clasificar dos tipos de viviendas de protección oficial:

• Viviendas de protección oficial de promoción pública: El promotor de estos inmuebles es el estado o la administración pública. Un organismo público aporta terreno, construcción y financiación de los inmuebles. Posteriormente, mediante concurso adjudica viviendas a aquellas personas que cumplan los requisitos y se hayan registrado como interesadas. 

• Viviendas de protección oficial de promoción privada: En este caso, un organismo público se encarga de aportar terreno y financiación, pero la construcción del inmueble queda en manos de una entidad privada.  En la mayoría de los casos las constructoras son cooperativas o promotoras inmobiliarias. 

Requisitos para optar a las viviendas de protección oficial

Para acceder a la compra o el alquiler de una vivienda de protección oficial se deben cumplir con unos requisitos que pueden variar de una comunidad autónoma a otra. Sin embargo, por norma general, estos son los requisitos básicos:

• Ser mayor de edad
• Estar empadronado en el municipio donde se encuentra la vivienda de protección oficial a la que deseas acceder
• Tener la nacionalidad española o residir legalmente en el territorio 
• El solicitante y el resto de su familia no pueden ser propietarios de ningún otro inmueble
• No haber recibido anteriormente una vivienda de protección oficial, o una ayuda referente a la vivienda por parte del estado
• Demostrar la necesidad de vivienda, por no tenerla o por incapacidad de sostenerla
• Demostrar la capacidad de cumplir el tipo de contrato requerido por las VPO
• Cumplir los requisitos económicos establecidos por el Plan de Vivienda
• No sobrepasar el límite de renta permitido para optar a dicha vivienda
• Estar inscrito en el registro de demandantes de VPO

Después debes inscribirte en el Registro de Solicitantes de Vivienda con Protección Oficial. Una vez inscrito en el registro, podrás buscar las convocatorias de viviendas de protección oficial que se ajusten a tus necesidades. Estas convocatorias suelen publicarse en los portales web de las administraciones autonómicas y suelen especificar los requisitos y el proceso de solicitud. Es importante estar atento a estas convocatorias y presentar la solicitud dentro del plazo establecido, adjuntando la documentación requerida.

¿Cómo es el proceso de asignación de una VPO?

Los trámites para comprar una vivienda suelen ser bastante tediosos, pero en el caso de las VPO tienes que tener en cuenta una serie de aspectos que veremos a continuación.

Una vez cerrada la convocatoria, se realiza el proceso de asignación de viviendas. Este se puede llevar a cabo por diferentes métodos, como sorteos públicos o baremación de puntos. En el caso de los sorteos, se asigna un número a cada solicitante que cumple con los requisitos, y se realiza un sorteo público para determinar el orden de asignación. En el caso de la baremación, se otorgan puntos según diferentes criterios, como ingresos, situación familiar, discapacidad, antigüedad en el registro, entre otros. Los solicitantes con más puntos tienen prioridad en la asignación de viviendas.

Una vez asignada una vivienda de protección oficial, se notificará al beneficiario, quien deberá aceptar y formalizar la compra o el alquiler de la vivienda siguiendo los procedimientos establecidos por la comunidad autónoma correspondiente. Estos procedimientos pueden incluir la firma de contratos, el pago de una entrada o el cumplimiento de ciertas condiciones específicas.

Es importante destacar que, debido a la alta demanda y las limitaciones en la disponibilidad de viviendas de protección oficial, el proceso de asignación puede llevar tiempo. Es posible que debas ser paciente y perseverar en tu búsqueda, ya que la oferta de viviendas puede ser limitada en comparación con la demanda existente.

Aunque el proceso puede llevar tiempo y requiere paciencia, las viviendas de protección oficial brindan a personas con menos recursos económicos la oportunidad de cumplir el sueño de tener un hogar propio, garantizando la estabilidad y la seguridad residencial.