Hay pocos pasos más importantes en la vida que el de firmar para adquirir una vivienda, y es que lejos de ser una decisión que se toma a la ligera, se trata de una gran inversión que determinará muchos aspectos de nuestra vida futura. Al buscar una vivienda, siempre filtramos por aspectos como la
ubicación, el precio, sus metros cuadrados, número de habitaciones,… pero cuando llega el momento de acudir a visitarla con el agente inmobiliario para ver esa vivienda con nuestros propios ojos, hay una serie de preguntas que es fundamental que resolvamos. ¡Así que coge papel y boli y toma nota!
Índice del artículo
Preguntas que debes conocer antes de visitar un piso
¿Por qué es tan importante plantear estas preguntas antes de comprometernos a firmar el contrato de arras? Pues hay 3 motivos clave:
- Poder negociar mejor la compra.
- Hacernos una idea más realista de cómo es la zona.
- Quizás lo más relevante, evitar malentendidos. Que todas las cartas estén sobre la mesa y quede todo súper claro para evitar disgustos más adelante.
Podemos desglosar las preguntas que debemos hacer al visitar un inmueble que estamos interesados en comprar en 3 grandes categorías:
Preguntar por la situación de la vivienda
Los desperfectos
Lo primero es conocer si hay detalles (pequeños o no tan pequeños) que deben ser arreglados. Por ejemplo: el estado de las cañerías, saber si hay humedades o goteras, si la calefacción y el aire acondicionado funcionan correctamente, si todas las puertas y ventanas cierran bien, etc. En el caso de que al dar por terminada esa primera visita, no te haya quedado del todo claro el estado del inmueble, no tengas reparos en hacer una segunda visita acompañado de un técnico que te ayude a valorar estos aspectos.
Las reformas
Saber qué mejoras se han llevado a cabo en la vivienda que queremos comprar y cuándo se realizaron por última vez (no es lo mismo que te digan que se hicieron reformas 2 años atrás que hace una década). Esto te permitirá determinar si el precio que se pide por esta vivienda es adecuado y podrás negociarlo con más facilidad en el caso de que no lo sea. ¡La información es poder!
La orientación
Este aspecto es clave porque te permitirá tener una idea de cuánto consumo energético acarreará esta vivienda, en función de su orientación respecto al sol y la distribución de las estancias.
Conocer la orientación adecuada de una vivienda te ayudará a ahorrar y optimizar el consumo energético.
La luz natural
Muchas personas quisieran mejorar este aspecto de su vivienda, porque consideran que toda ella es preciosa, con una buena distribución, dimensiones perfectas, localización ideal…pero la luz natural en la vivienda no es su punto fuerte. Desgraciadamente, más allá de hacer ventanales más grandes, esto no es algo que podamos cambiar. Para asegurarte de que el inmueble que quieres comprar cuenta con una buena entrada de luz natural, es recomendable que lo visites a diferentes horas del día, no solo a la que te hayan citado la primera vez. Porque cabe esperar que esa será la hora a la que mejor luz reciba pero…¿y durante el resto del día?
Los metros útiles
Este es uno de los aspectos en los que acostumbra a haber malentendidos, y es que los metros útiles no son sinónimos con metros construidos. Por eso, puedes medir las estancias y así tener por seguro que el espacio del que podrás disponer a efectos prácticos es el que estás buscando.
¿Hay comunidad de vecinos?
Y, junto con esta pregunta, también es crucial que se nos informe de si está previsto el abono de alguna derrama o se van a llevar a cabo obras de algún tipo. Lo último que quisiéramos al entrar súper ilusionados en nuestra nueva casa es encontrarnos con que tenemos que hacer frente a un importante pago totalmente imprevisto, o ver que vamos a estar semanas o meses escuchando el infernal sonido de las obras y aguantando la suciedad que siempre traen consigo. Esas cosas se tienen que saber de antemano para tomar una decisión informada.
Preguntar por la venta de la vivienda
Aparte del estado del inmueble en el que queremos invertir, hay que cuestionar también la propia venta de la vivienda. Estas son algunas de las preguntas clave:
¿Por qué se vende?
Sin duda, la más obvia, pero no por ello menos necesaria. Es relevante que sepamos si hay algún tipo de problema que ha llevado a la venta del inmueble (porque quizá también suponga un problema para nosotros).
¿Cuánto tiempo hace que está a la venta?
Esta es una de aquellas cuestiones cuya respuesta nos puede permitir negociar el precio del inmueble, dado que si lleva muchos meses en el mercado, habrá más interés por conseguir la venta.
¿Cuándo podrías vivir aquí?
En el caso de que, por el motivo que sea, el propietario necesite un margen de tiempo antes de desprenderse de la vivienda completamente, es importante que lo sepamos para tener una idea realista de cuándo podremos mudarnos definitivamente a nuestro nuevo hogar.
Preguntar por el estado de la documentación
Por último, es crucial saber si toda la documentación está en orden, disponer de los justificantes de pago necesarios que nos permitan corroborar que el inmueble está libre de cargas (como el impuesto del IBI, suministros, etc).
En este sentido te recomendamos informarte en profundidad para saber si el inmueble tiene cargas, antes de efectuar la compra.
De este modo, podrás asegurarte de que no hay pagos pendientes.
