Si estáis esperando la llegada de un bebé a casa, estáis viviendo un momento mágico, maravilloso y también un poco abrumador, las cosas como son. Hay muchas cositas que se tienen que tener en cuenta y queremos llegar a todo, pero también es importante que disfrutemos del proceso, que gocemos de esta nueva etapa que la vida abre ante nosotros. Con el fin de que puedas organizarte mejor y tengas un step by step de cómo proceder antes de la llegada del retoño, te desglosamos todo lo que debes hacer para tener tu hogar listo para cuando llegue el esperado momento.
A continuación, te mostramos una serie de aspectos que tienes que tener en cuenta para la llegada del bebé:
Índice del artículo
Una limpieza profunda de la estancia
Esto es esencial, ya que un recién nacido es una cosita muy sensible, de modo que es importante aseguraros de que el espacio donde vais a vivir esté limpio de polvo, bacterias… que no haya suciedad en general, vaya. En el caso de tener que usar productos químicos, que no lo haga la embarazada, obviamente, ¡más vale pedir ayuda que tener un disgusto!
Hay que desinfectar todo, principalmente el baño y la cocina… ¡todo!
Preparar el espacio necesario para el bebé en nuestro hogar
Si habéis estado postergando el momento de hacer sitio en casa, tenemos una primicia: ha llegado la hora. Sí o sí, necesitaréis espacio para este nuevo inquilino, porque, aunque sean muy chiquitines, ¡hay que ver todo lo que requieren! Que si cuna, que si moisés, que si mecedor, que si estación de cambio de pañal… son muchas cosas. Cuanto antes os deshagáis de todo aquello que ya no necesitáis, mejor. Dicen que cuando se trata de los niños, todo el espacio que puedas ganar te parecerá poco, con eso lo decimos todo.
Aunque parezca mentira, esto es así tanto en inmuebles de 60 a 80 metros cuadrados, como Passatge Living, una promoción de obra nueva en Barcelona en el Poblenou, como en viviendas de grandes dimensiones, como es el caso de Enrique Granados, con 2 dormitorios y 130 metros cuadrados, grandes baños y terrazas.
Hacer un planteamiento de cómo va a ser el cuarto del bebé
Posiblemente esto es lo que más ilusión haga ante la inminente llegada de un bebé.
Pero vale la pena considerar que no es imprescindible volverse loco con todos los pequeños detalles de la habitación, porque, en primer lugar, no son cosas prioritarias y, en segundo lugar, al bebé le va a dar lo mismo dormir en una habitación con estrellitas en la pared o toda blanca. Hasta que no hayan pasado unos meses, no empezará a percatarse de su entorno, para entonces, podéis hacer un planteamiento e ir creando su cuartito.
Prepara también tu habitación para el recién nacido
Independientemente de si haréis colecho o no, es necesario tener lista vuestra habitación para que luego no os pille el toro. Limpieza a discreción, despejad el armario, comprobad que tenéis una iluminación suficientemente tenue para un recién nacido…y, en el caso de querer hacer el mencionado colecho, es recomendable tener la cunita lista unos 15 días antes de la fecha estimada del parto.
En una vivienda como Marina Living, una promoción de pisos en el puerto de Badalona con vistas al mar y piscina comunitaria, el dormitorio tiene una entrada de luz natural fenomenal, pero puede que valga la pena poner alguna cortina que te permita regular esa espléndida luz en función de lo que pida el bebé y de lo que necesite la mamá en cada momento.
Haz previsión de menús
Poner en un calendario el menú de los primeros 15 días después del parto os facilitará muchísimo la vida y aún más si dejáis preparados los tuppers para la primera semana después de dar a luz. Porque puedes estar segura de que con el popurrí emocional y el agotamiento físico que conlleva un parto, no tendréis ganas de meteros en la cocina. Por eso, hacer batch cooking (es decir, cocinar varias comidas y guardarlas en la nevera o el congelador) es la clave.
Replantéate la distribución de las cosas
Puede que antes de tener un bebé no te percataras de que ese jarrón que tienes justo al lado de la puerta de la habitación es fácil de tumbar. O que esa alfombra que hay debajo de la mesita de noche es una invitación a patinar o un nido de polvo. Estas son cositas que, en el momento de estar todo el día de aquí para allá con un bebé en brazos, empezarán a molestarte, porque te dificultan el paso, porque te puedes dar un golpe tonto y se te girará el humor. Por este motivo, es recomendable reubicar las cosas en función de esta nueva llegada. Todo tiene que responder a un simple criterio: facilitarnos la vida. Un ejemplo clarísimo: los bebés gastan una media de unos 12 pañales al día. Con esas cifras, no tiene absolutamente ningún sentido que tengáis el cubo de la basura donde irán todos esos pañales en la otra punta de la casa. ¡Viva lo práctico y cómodo!
Refresca tu vestuario
Durante los primeros meses la madre llevará ropa holgada y cómoda de premamá, de modo que te recomendamos que despejes el armario de toda aquella ropa que no te vas a volver a poner en unos meses, para que así tengas lo que realmente necesitas cerca y bien ordenadito. Es importante que te sientas a gusto contigo misma, que te sientas bien, y esto será un paso en esa dirección.
Si haces todo esto, estaréis más que preparados para la llegada de vuestro querido/a, ¡así que solo nos queda desearos mucha felicidad (y paciencia) para esta maravillosa nueva etapa!