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¿Cómo funciona una hipoteca para una segunda residencia?
Si has estado echando un vistazo a nuestro catálogo de obra nueva residencial y te has enamorado de una de nuestras promociones de obra nueva en la costa como, por ejemplo, la exquisita Jardins de Sa Riera en Begur, puede que estés considerando adquirirla como segundo inmueble.
Un lugar apto para el descanso y la desconexión, lejos de vuestras obligaciones, del colegio, del ajetreo de la ciudad, de las prisas…
En ese caso, el artículo que traemos hoy te viene como anillo al dedo, porque a continuación, vamos a explicar todo lo que necesitas saber si estás planteándote pedir una hipoteca para una segunda residencia.
¿Qué diferencia hay entre una hipoteca para una segunda residencia de una habitual?
Si estás consultando esta información posiblemente sepas cómo solicitar una hipoteca y estés pensado en pedir tu segunda.
En primer lugar, tengamos claro qué es exactamente una hipoteca de segunda residencia: se trata de un préstamo solicitado para poder financiar un inmueble que no sea nuestra residencia habitual.
En esta evidente definición está el primer quid de la cuestión, y es que las condiciones que se nos ofrecen cuando pedimos una hipoteca por segunda vez difieren a las de la primera vivienda (los requisitos son otros, los plazos de pago, etc). Seguidamente, ¡lo vemos en detalle!
Requisitos para pedir una hipoteca de segunda vivienda
Que no te sorprenda si son un poco más estrictos de lo que fueron cuando pediste tu primera hipoteca. Tiene sentido, porque al tener una segunda hipoteca, la primera siempre será la que tenga una mayor prioridad de pago, de modo que las hipotecas de segunda residencia tienen más riesgo para la entidad que las concede.
Disponer de un mayor capital ahorrado
Se calcula que se debe tener ahorrado el 40% de lo que no financie el préstamo que pides, además de un 10 o un 12% extra que te permita pagar los gastos asociados a la compraventa (estos son, por ejemplo, los impuestos o la notaría)
El ahorro que se exige para que se nos conceda una hipoteca para esa vivienda en la playa que tanto queremos, es mayor que la que se nos pide para nuestra casa habitual. Como cabe esperar, la entidad bancaria a la que solicitemos dicha hipoteca tendrá que llevar a cabo una evaluación para determinar que podamos hacer frente al pago de nuestra primera hipoteca y la segunda, sin problemas. Evidentemente, la cosa varía muchísimo en función de cuánto nos quede por liquidar de nuestra primera hipoteca y cuánto estemos solicitando para esa segunda hipoteca.
Por norma general, el máximo porcentaje que suele concederse para este tipo de inmuebles es del 60%, contrastando con el 80% que se concede para las residencias habituales.
Condiciones de hipoteca de 2º residencia
El tiempo que se te concede para pagar esa hipoteca es inferior, debido precisamente a ese potencial riesgo de impago en el caso de que tu economía sufra estragos.
¿De cuánto tiempo estamos hablando? El máximo está en 30 años, a pesar de que muchas entidades financieras piden que se realice en menos tiempo incluso.
Debido a que la horquilla de tiempo para amortizar el crédito concedido es más reducida, las cuotas son más altas. A propósito de este punto, es un buen momento para recordarte que no es recomendable que destines más del 35% de tu sueldo mensual neto a pagar las cuotas de la hipoteca.
Documentación necesaria para solicitar una hipoteca bancaria de segunda residencia
En realidad, tanto la documentación como los trámites para pedir la segunda hipoteca son los mismos que para la primera vivienda:
- NIE
- CIRBE: para comprobar el riesgo hipotecario
- Declaración de la renta del último ejercicio
- Vida laboral
- Avales (Costes de registro de la propiedad, propiedades, informes financieros de avalistas, etc).
- Información bancaria más reciente, contrato laboral y nóminas (si trabajas por cuenta ajena) o declaración del IVA (si eres autónomo)
- Los préstamos que hayan sido contratados.
¿Cuándo es el momento ideal para solicitar dinero al banco para una segunda casa?
Quizás después del caluroso verano que ha marcado este 2022, has empezado a desear tener un segundo hogar donde refugiarte del calor, cerquita del mar, donde poder gozar de las aguas cristalinas que nos brinda la Costa Brava.
Por supuesto, por un lado, tienes que valorar si tu nivel adquisitivo y otras circunstancias personales a tener en cuenta, se alinean con tu deseo. Pero también es recomendable estudiar la situación del mercado para determinar si es o no un buen momento para comprar una segunda vivienda.