Parece que a los españoles cada vez nos cuesta más dormir. Quizás ciertos malos hábitos nocturnos como el consumo de alcohol o las cenas demasiado picantes, o quizás puede que sea el estrés laboral y la ansiedad que nos provoca no poder desconectar cuando nos vamos a la cama y lo que nos dificulte descansar como es debido. Sea como fuere, lo cierto es que en los últimos años se han incrementado los problemas para dormir y por este motivo los siguientes hábitos te serán de gran ayuda para cuidar las horas de sueño.
Índice del artículo
¿Cómo mejorar el sueño y descansar mejor?
Los procesos regenerativos del cuerpo humano están íntimamente ligados con las horas de sueño y no con las horas que pasamos en la cama. Porque uno puede estar en el dormitorio durante ocho horas y de ellas descansar tan solo tres o cuatro, ya que las fases del sueño inciden directamente en cuán productivos seremos al día siguiente: si alcanzamos la fase REM en nuestro sueño, seguramente amanezcamos llenos de energía y arrojo para afrontar el día. Sin embargo, si nos pasamos la noche dando vueltas de un lado para el otro, la jornada se nos presentará farragosa y cuesta arriba. 
El último informe del mes de abril del 2021 del Instituto Nacional de Estadística (INE) ejemplifica cómo tras el confinamiento a más del 20% de la población española le cuesta dormir. Una cifra algo superior a la registrada previamente a la pandemia y quizás por este motivo también el consumo de medicamentos para conciliar el sueño haya aumentado considerablemente.
Si quieres, pues, dejar de contar ovejas por las noches, anótate los siguientes tips, porque te serán más útiles que el mejor corrector de ojeras del mercado.
La rutina: tu gran aliada
Si por todos es sabido que la rutina ayuda a los más pequeños a adquirir hábitos beneficiosos para su desarrollo, también lo es para los adultos, porque lo rutinario crea una dinámica por la mera práctica que, al final, se acaba automatizando. Si comienzas a cenar ligero, a darte una ducha caliente antes de ponerte el pijama, a encender un difusor con unas gotitas esenciales de lavanda y a regular las luces de tu casa unas horas antes de irte a la cama, tu cerebro entenderá que debe empezar a bajar revoluciones y se pondrá en mood relax.
Es sumamente importante acostarse y levantarse más o menos a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, porque de esta manera se regulan los ritmos circadianos que responden a la luz y a la oscuridad.
Y si con todos estos hábitos crees que todavía no es suficiente, anota el siguiente: realiza actividad moderadamente intensa al menos cuatro veces por semana. El ejercicio físico no es solamente útil para combatir el sedentarismo o llevar una vida saludable. El deporte segrega endorfinas y estas nos aportan una sensación de bienestar, pero hacer ejercicio también puede aumentar nuestros niveles de melatonina, esto es, de la hormona que se encarga de regular nuestro sueño por lo que sudar cuando ya ha entrado la tarde puede hacer que nuestro insomnio desaparezca y logremos, al final, caer en la cama rendidos cual bebés.
Tu habitación: un santuario
El entorno de tu dormitorio principal también es sumamente importante para acabar con el insomnio. Si el dormitorio donde se ubica tu cama es caótico, está desordenado, mal ventilado, etc. será mucho más complicado que logres dormir ocho horas del tirón. Debes asegurarte de que la habitación sea silenciosa y también es recomendable que la decores de manera minimalista: pinta las paredes de color blanco, despeja las superficies, compra sábanas de algodón o, mucho mejor, de seda, y antes de irte a dormir rocía en la almohada un spray de lavanda de los muchos que ofrece el mercado.
Un estímulo incesante: las pantallas
¡He aquí el quid de la cuestión! El móvil se ha convertido en una extensión de nuestras extremidades superiores: siempre a mano para cualquier ocasión, porque desde el móvil la gente ya no solo llama por teléfono, sino que curiosea, edita imágenes, trabaja, realiza transferencias bancarias, etc. Y ese es precisamente el problema, la luz que desprende la pantalla del dispositivo. Si antes de irnos a la cama o incluso cuando ya estamos en ella nos entretenemos mirando algún vídeo de Youtube o charlando con una amiga nuestro cerebro, como todavía está recibiendo luz, entiende que debe estar activo, que aún no es hora de descansar, por lo que no segrega melatonina que es la hormona que regula el sueño. La luz artificial del móvil, por lo tanto, inhibe su fabricación y por este motivo al menos una hora antes de irnos a la cama, deberíamos desconectar del mundo y relajarnos alejados de cualquier estímulo.
La mejor idea es dar un paseo por el pasaje natural en el que se han construido las 52 viviendas de la promoción Jardins de Sa Riera en Begur. Unos hogares a pie de playa con mucha luz natural en la vivienda y en plena naturaleza, en una zona virgen de la Costa Brava donde será imposible no erradicar el insomnio, pues el lugar emana una paz mucho más efectiva y saludable para el desvelo que los fármacos más potentes.
