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Está comprobado que tener una vivienda con buenas vistas mejora nuestra calidad de vida. Nos hace mucho bien tener un hogar en el que nos sintamos realmente a gusto, ya que facilita la mejora de nuestro rendimiento, hace crecer nuestras habilidades sociales y aumenta nuestra sensación de felicidad. Pero, cuando hablamos de “buenas vistas” ¿A qué nos referimos exactamente? ¿Y qué tipo de beneficios nos aporta?
Un estudio realizado por la Universidad de Granada en 2020 concluyó que las personas que residen en poblaciones a nivel del mar tienen mejor frecuencia cardíaca y mayor control del eje hormonal. Y es que residir en la costa es muy positivo: la UNESCO no se cansa de recomendar el denominado “estilo de vida mediterráneo”. Uno de los pilares de este estilo es el contacto con la naturaleza.
En líneas generales tener buenas vistas desde casa tiene los siguientes pros:
Vivir en un ático, rodeado de zonas verdes o delante del mar es una inyección de aire y adrenalina. Además, la sensación de espaciosidad nos hace sentir libres.
Normalmente los pisos que tienen buenas vistas automáticamente tienen más luz. Es una relación directa e inevitable. Es por este motivo que los espacios luminosos atraen porque todo lo que nos resulte orgánico y natural nos beneficia. El ser humano es un ser de energías y la luz es nuestra mayor fuente de energía natural.
Es un bien preciado en la sociedad del siglo XXI. La concentración de actividades en zonas urbanas y núcleos industriales promueve la contaminación auditiva. De hecho, estamos tan acostumbrados a convivir con ello, que hemos integrado el ruido en nuestras vidas, hasta el punto de que solamente nos damos cuenta de nuestra necesidad de silencio cuando estamos aislados.
Esta es otra atesorada joya especialmente valorada de la sociedad post-moderna, en la medida en que brilla por su ausencia, los tiempos han cambiado. Ahora buscamos espacio para nosotros y los nuestros sin sentirnos como abejas en una colmena.
Cuando salimos de las áreas que concentran mucha actividad nuestra tensión y nuestra actividad cerebral se relaja y esto es beneficioso para nuestro sistema nervioso.
Se ha comprobado que los niveles de serotonina se incrementan en hogares con altura, con vistas al mar, en medio de la naturaleza o rodeados de zonas verdes frondosas. Se trata del ansiado “bienestar”. La búsqueda de la felicidad también pasa por encontrar un buen domicilio.
Dicen que nuestro estómago es el segundo cerebro, y es que ambas cosas están conectadas porque cuando estamos estresados muchas veces padecemos problemas gastro-intestinales.
Hacer actividad física mejora nuestro estado. Por eso es recomendable hacer ejercicio al menos 3 veces por semana.
Sin duda alguna esto es más subjetivo, pero está claro que las buenas vistas las podemos encontrar en el campo, en el rascacielos de una gran ciudad, o en un pequeño pueblo delante del mar. La clave es la mirada. Lo importante es que cuando estemos dentro y dirijamos nuestra mirada hacia la ventana, nos sintamos bien y disfrutemos de lo que nos rodea.
Las magníficas promociones de obra nueva en la costa mediterránea –Scenic y Velaya– en Estepona (Málaga), te permiten precisamente disfrutar desde tu ventana de unas vistas espectaculares de la playa. Los estudios confirman que la brisa y el agua del mar cicatrizan heridas, disminuyen nuestros problemas respiratorios, mejoran la movilidad de las articulaciones y combaten pequeñas infecciones. Estas viviendas además tienes zonas comunitarias con pistas de tenis, áreas ajardinadas para hacer paseos durante los atardeceres, piscina y espacios de recreo para hacer vida social y relajarte sin tener que moverte prácticamente de casa. Todo ello situado en un paraje natural único que te permitirá desconectar al 100%.
Otro escenario envidiable es sin duda alguna el que nos ofrece la promoción de obra nueva del complejo residencial Sa Riera, en Begur. Podemos afirmar sin equivocarnos que en estas viviendas no hace falta poner cuadros porque sus ventanales ofrecen un paisaje salvaje de ensueño. Cuenta con grandes terrazas y jardines privados que te permiten conectar con el mar tanto de día como de noche. Y es que su carácter marinero y la calidez del clima, desaceleran tus constantes vitales cambiando tu ritmo de vida y tu reloj interno. Aquí, mirar por la ventana es realmente terapéutico.
Y si buscas tranquilidad rodeado de zonas verdes, pero no quieres estar completamente aislado, te proponemos descubrir Dehesa Living en Puerta de Hierro. Se trata de una exclusiva urbanización a las afueras de Madrid con todo tipo de comodidades. Con su diseño vanguardista y sus acabados excepcionales sentirás que esta promoción de obra nueva en Madrid es como en un pequeño palacete moderno. Estos inmuebles brillan por la cantidad de luz natural que entra por sus ventanas y es que todo lo que les rodea es verde.
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