A pesar de los inciertos momentos en los que nos encontramos actualmente a escala global, la realidad es que la rentabilidad de la vivienda en España se mantiene en el 6,5%, convirtiéndose en uno de los focos de inversión con menor riesgo. Por ello, los expertos aseguran que el sector inmobiliario sigue siendo una de las inversiones alternativas más interesantes y un buen valor refugio en 2022.
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Ventajas de invertir en la compra de vivienda
Para muchos, pensar en invertir es sinónimo de la adquisición de un inmueble. Y es que, construir de esta manera un patrimonio es algo muy interiorizado en nuestra sociedad.
Pero también es importante destacar que la inversión inmobiliaria es poco arriesgada, los precios de las viviendas no son tan volátiles como otros productos financieros y lo habitual es que su valor, en mayor o menor medida incremente con el paso de los años. Por lo que resulta una buena opción de protección contra la inflación.
Pero también debemos tener en cuenta sus inconvenientes como los gastos e impuestos por la compra, el coste de mantenimiento de la vivienda o el hecho que no se trate de un activo demasiado líquido.
¿Dónde invertir en inmuebles en España?
Se dice popularmente que existen tres aspectos a tener en cuenta a la hora de comprar una vivienda: ubicación, ubicación y ubicación. Sin llegar a estos extremos tan anafóricos, sí que debemos tener claro que hay zonas que son más rentables que otras.
Por ejemplo, en los últimos años la región de Murcia, la Comunidad Valenciana, Cataluña o las Islas Baleares se han convertido en buenos focos de inversión inmobiliaria. Sin embargo, Madrid y Barcelona siguen siendo zonas muy destacadas en las que invertir en vivienda, siempre valorando los barrios y la proyección de futuro de cada uno de ellos.
Por ejemplo, Skyline Madrid es un proyecto inmobiliario muy interesante. Situado en el barrio de Tetuán, estas dos torres de 100 metros de altura y 600 viviendas se convertirán, sin lugar a dudas, en un motor de cambio y regeneración urbana de la zona, pues implicará un cambio estructural y socioeconómico en la zona que la impulsará económicamente y esto revalorizará sustancialmente la inversión.
En Barcelona, Marina Living ofrece una alternativa a aquellos que, después de la pandemia y con el auge del teletrabajo, han visto cómo cambiaban sus prioridades en cuestión de vivienda. Compuesta por 216 pisos en el puerto de Badalona con vistas al mar y situada en el área metropolitana de Barcelona, estas viviendas aúnan los requisitos que esos nuevos compradores buscan en una vivienda: cerca de espacios abiertos, con mucha luz natural, con vistas a la naturaleza (al Mediterráneo, en este caso), pero muy cerca de la gran ciudad y de todos los servicios que esta ofrece.
Las inversores inmobiliarios extranjeros en España buscan este tipo de emplazamientos ya sean las grandes capitales o las zonas costeras de nuestro país.
¿Qué tipos de inversiones inmobiliarias te recomendamos desde Stoneweg Living?
Existen diferentes maneras de invertir en “ladrillo” y cada una de ellas se cumple con la visión que cada uno tenemos de su utilidad y su futuro.
- Inversión como patrimonio: Se trata de adquirir una vivienda propia, como una inversión a largo plazo. Un lugar en el que vivir y, al mismo tiempo, en el que invertir para tener seguridad económica en el futuro.
- Para alquilar: Comprar un piso o una casa para utilizarla como fuente extra de ingresos adicionales en forma de rentas del alquiler, es una de las inversiones más habituales. Si este es tu caso, debes calcular bien la renta que cobres para que te queden ganancias después de abonar la cuota de la hipoteca y los gastos de la casa (el IBI, la comunidad, la tasa de basuras, el mantenimiento, el seguro, etc.).
- Crowdfunding inmobiliario: Es una opción que desde hace unos años ha visto un notable crecimiento. Es un modelo de financiación colaborativa que permite participar en los rendimientos por venta o alquiler de propiedades con una aportación menor que si se hiciera de manera individual.
Para que la inversión vea sus frutos en el futuro, en el presente deben darse algunas condiciones indispensables: que el precio del inmueble sea adecuado, que las condiciones de la hipoteca sean buenas y que el futuro propietario tenga ahorros para dar una holgada entrada (un 20% superior al mínimo que exige el banco, por ejemplo).
¿Invertir en nueva construcción o un inmueble de segunda mano?
Actualmente, existe mucha demanda de pisos de alquiler. De hecho, la oferta de viviendas de alquiler es muy inferior a su demanda, especialmente en ciudades como Madrid o Barcelona.
Así que, si tu intención es comprar una vivienda para sacarle un rendimiento a través del alquiler, debes tener en cuenta algunos aspectos antes de decidirte:
- Ubicación, opta por barrios o poblaciones con buena proyección de futuro.
- Saber si tu inversión se va a dirigir hacia una vivienda de segunda mano o de obra nueva. Las primeras suelen tener un precio más económico que las segundas (a menos que estas las compres sobre plano), pero las nuevas suelen alquilarse de manera más rápida, porque tienen un valor añadido para los inquilinos y, además son aptas para alquilar desde el primer momento (en los inmuebles de segunda mano habitualmente es necesario realizar reformas o, como mínimo, un buen lavado de cara).
Si bien, invertir en obra nueva tiene un precio de compra mayor, pero también puedes captar inquilinos dispuestos a pagar un alquiler más alto, solo por el hecho de ser nueva. Y es que los pisos nuevos suelen tener mejores equipamientos, servicios y zonas comunes (piscinas, gimnasio, jardines, áreas de juegos infantiles, trasteros, parking, etc.) que los de segunda mano y eso también es un punto a su favor a la hora de alquilarlos.