MANTÉN TUS ARMARIOS SIEMPRE EN ORDEN
Estamos ya a 23 de noviembre… ¿y todavía no te has puesto con el cambio de armario? De acuerdo, el “veroño” es una realidad, qué duda cabe. El otoño ya no es lo que era, pero ya estamos con un pie en el invierno casi, así que, si aún tienes que darles un repaso a tus armarios y, ya de paso, hacer un poquito de limpieza y decidir con qué te quedas, ¡has dado con la lectura adecuada!
Antes de nada, empecemos con algunas premisas troncales para tener un hogar ordenado y, consecuentemente, una vida más cuidada también.
- Haz primero lo que menos tiempo ocupe. Es decir, cuando te surja una pequeña tarea de dos minutos aproximadamente, quítatela de encima cuánto antes, porque sino se convierte en peso mental. Si una de las miles de cosas que tienes que hacer es algo tan sencillo como una llamada rápida o ponerle un protector a las patas de la mesa para que no ralle el suelo, hazlo antes que nada.
- Aprovecha el ritmo que has cogido haciendo esa pequeña tarea para finiquitar las muchas otras cosas que tienes en esa infinita To-Do list, ya sea recoger o limpiar.
- Superficies despejadas: los expertos recomiendan mantener 5 de las superficies de nuestras viviendas limpias y despejadas cada día, puesto que las usamos a diario y tenerlas arregladas nos permitirá llevar a cabo nuestras faenas sin complicaciones. Estas 5 superficies son la cocina, la mesa del comedor, la repisa del baño y el suelo del salón. Nada de juguetes tirados por el suelo, platos por recoger en la mesa, mil y un objetos en el baño…
Algunos trucos para tener un armario organizado
Ahora sí, vamos al quid de la cuestión. Si no quieres empezar el día con un humor de perros, es de vital importancia que traslades el orden general de tu casa al espacio particular del armario. Bueno, tanto tú como tus peques, así que, si te sirve este post, no dudes en compartir tu aprendizaje con ellos, para que también se acostumbren a ordenar todas sus cosas.
- Vacía y vuelve a empezar. ¡No intentes poner orden antes de abordar el desorden! Lo mejor que puedes hacer antes que nada es vaciar todo el armario y dedicarle un tiempo a escoger qué necesitas y de qué deberías deshacerte (porque ya no lo usas, porque ya no te va bien, porque ya no está en buen estado, etc.).
- Los organizadores de cajones son tus aliados: ya sea los de tela, los rígidos, grandes, pequeños, … ¡hay de todos los colores! Son la mejor manera de asegurarte que no se te desparejan los calcetines y una forma muy cómoda de almacenar la ropa interior.
- Ahorra espacio. En una vivienda, el espacio es un bien muy preciado.
Esta tarea doméstica no se puede hacer correctamente si la haces con prisas, hay que dedicarle un rato a redistribuir las cosas que tienes almacenadas (ya sean ropa o juguetes, o elementos decorativos, etc.) de la mejor manera posible para no desperdiciar espacio. ¡Es como un Tetris!
- Ordena por colores: tener armonía cromática influirá en tu humor (para bien, por supuesto) cada vez que entres en tu vestidor o abras tu armario. Además, lo que es más importante aún, te permitirá identificar con rapidez aquella prenda que tienes pensado ponerte.
- Doblas vs Colgar. Hay algunas prendas que deben ir perchadas sí o sí, a no ser que quieras ponerte algo arrugado. ¿Qué debes colocar en perchas? Vestidos, faldas, chaquetas, americanas, camisas/blusas y pantalones. En el caso de los tejanos, puedes optar por enrollarlos como un burrito para ganar más espacio.
Las ventajas de tener un vestuario
- Un día a día más ordenado: quien haya conseguido dejar atrás una vida caótica y desordenada, por una más organizada, puede dar fe de ello: la paz mental de saber que cada cosa está en su sitio, no tiene precio.
- Tendrás tu ropa a mano: ¡Qué horror estarte media hora para encontrar lo que quieres ponerte, solo porque no fuiste capaz de dejarlo en su sitio la última vez que lo usaste! O, lo que es peor, ¡que ni siquiera tenga su propio sitio!
- Un espacio cómodo y funcional para tus looks: con un vestidor, será un placer dedicarle unos minutos a escoger qué te quieres poner antes de salir de casa.
- Más espacio en otras estancias: piénsalo: si liberas espacio en tu dormitorio quitando ese armario o esa cajonera que tantos valiosos centímetros acapara, tendrás una habitación que respire mucho más.
En Stoneweg Living, nos gusta pensar en este valor añadido, como demuestran estos dos proyectos:
Enric Granados, una promoción de obra nueva en Barcelona de 2 y 3 dormitorios que parece estar pensada al milímetro para los más aficionados al diseño y a la moda. Con sus diáfanas estancias, elegantes y funcionales, está también dotada de un vestidor de lujo.
Un apartamento en la playa como los que brinda Scenic, en sus viviendas de 5 dormitorios, tiene un vestidor muy amplio entre el dormitorio principal y el baño principal.