En un mundo donde cada vez más la situación del cambio climático está en nuestras manos y la escasez de agua se ha convertido en un problema común, debemos poner nuestro granito de arena para acabar con la escasez de agua del planeta.
Puede parecer un tópico, pero, partiendo de la base de que “el agua es sinónimo de vida”, se trata de una necesidad vital en la que debemos colaborar seriamente. Hablamos de un elemento que abarca cerca del 70% de la Tierra, y sin el que no existiríamos ni las personas, ni los animales, ni las plantas.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), el consumo promedio de agua en el hogar es de 133 litros/persona diarios; el 36% para la higiene personal, el 32% para el inodoro, el 27% en cocina, y solo un 5% para beber.
Estas preocupantes cifras conllevan a replantearnos el uso del agua en el contexto de la vivienda, una necesidad urgente a nivel global. A continuación, presentamos varias prácticas y consejos que fomentan el ahorro de agua en casa.
Índice del artículo
5 consejos para ahorrar agua en tu hogar
Practica la ducha inteligente
A todos nos gusta disfrutar de una ducha larga y relajante, con música que nos haga desconectar y perder la noción del tiempo, pero resulta una práctica incompatible con el ahorro de agua, y es que según los cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llegamos a gastar hasta 200 litros por cada 10 minutos de ducha.
Breve y suficiente, así es cómo debe ser cada vez que nos duchamos. Muchas duchas ya incorporan un sistema con sensor de movimiento para cortar el agua cuando
no es necesaria, llamadas duchas inteligentes. Un cabezal de bajo flujo y utilizar el agua lo justo y necesario cuando nos duchamos será la clave para no gastar de más.
Existen también los reductores de presión de agua, un elemento más que puedes incorporar en tu ducha. Además, una práctica común es lavar la fruta y la verdura dejando correr el agua con el grifo abierto y esto no debería ser así, por lo que recomendamos hacerlo en un mismo recipiente y usar la misma agua para todo.
Despídete del inodoro derrochador
Gracias a las avanzadas tecnologías actuales y la gran variedad de sistemas desarrollados, existen inodoros de alta eficiencia que ayudan a reducir el consumo de agua.
La opción más recomendable es la cisterna de doble descarga, que te permite elegir entre dos tipos de descarga de agua según consideres necesario. Además, debemos recordar que el baño no debe hacer la función de papelera, por lo que deberás poner fin a la costumbre de desechar cualquier elemento por el inodoro y contar con una pequeña papelera en el interior del baño para evitar esta mala práctica.
Aprovecha el agua de la cocina
Así es la cocina, el espacio de la vivienda donde el agua fluye más y de forma constante. Ya sea lavando los platos, las verduras, usar el lavavajillas, descongelar alimentos e incluso usar la lavadora que acostumbra a estar cerca, la cantidad de agua consumida a diario en la cocina es excesiva.
A la hora de lavar los platos, una forma simple de disminuir su uso es llenar el fregadero de agua en lugar de dejar el grifo abierto hasta que acabemos. Otro ejemplo es el buen uso de la lavadora, esta debe ponerse en marcha con el sistema correcto y la carga debe estar completamente llena, podrás ahorrar así hasta 2.500 litros cada mes.
Aplicando estos consejos estamos seguros de que el ahorro de agua y energía en la cocina aumentará. Además, lo notarás en una reducción de los gastos energéticos de tu vivienda.
Las fugas, el enemigo escondido
Revisa grifos, cañerías, cisternas y cualquier superficie que se te ocurra que pueda experimentar fugas. Un goteo constante durante un largo periodo de tiempo puede sumar grandes cantidades de agua desperdiciada. Poner fin a estos pequeños detalles será un doble beneficio, tanto para tu bolsillo como para el planeta.
A su vez, los grifos serán un recurso de agua ideal para aquellos que esperan a que se caliente para poder usarla. De este modo, recomendamos recolectar dicha agua y reutilizarla para fregar el suelo, regar las plantas, lavar piezas de ropa a mano, lavar los platos, etc.
Para los amantes de las plantas
Si cuentas con plantas en casa e incluso tienes un jardín, el agua que utilices para regarlas será clave en el ahorro. La mejor opción será recoger y reutilizar el agua de la lluvia, tan sencillo como colocar un recipiente en una superficie plana donde la lluvia caiga directa y esperar a recolectarla para su posterior uso. Además, deberás evitar regar durante el día para que así la humedad no se evapore y la planta la absorba de forma natural. También puedes reutilizar el agua del lavado de las frutas y verduras para este mismo fin.
¿Puedo ahorrar agua fuera de casa?
Del mismo modo que en casa debes acabar con las fugas, si detectas una fuga en la calle deberás avisar a los servicios municipales para que la reparen lo antes posible. Por otro lado, a la hora de lavar el coche puedes elegir llevarlo a túneles de lavado profesionales donde el agua recircule, ya que lavarlo con manguera consume una media de 500 litros por coche.
En resumen, cada gota cuenta y el poder que tenemos las personas para contribuir en la causa de acabar con la escasez de agua es mucho mayor de lo que pensamos. Implementar a diario pequeñas acciones en tu casa que contribuyan al ahorro de agua no es solo una necesidad, sino una inversión que agradeceremos en nuestro futuro.
